Quién está detrás de… Caja de la Música: La historia del músico que descubrió su vocación enseñando en Arganda del Rey

En esta entrega de “Quién está detrás de…” presentamos a Caja de la Música, una academia que nació casi por sorpresa pero que se ha convertido en un rincón donde niños y jóvenes de Arganda del Rey descubren el placer de hacer sonar sus primeras notas. Hablamos con su fundador, cuya historia demuestra que la música puede brotar de los lugares más insospechados.
¿Quién eres y cómo acabaste lanzando este proyecto?
“Soy músico de formación, con estudios superiores y un máster en música. Como muchos en este camino, sabía que ser músico profesional abría un abanico muy amplio: interpretación, composición, investigación, producción… Pero lo curioso es que, cuando alguien me preguntaba qué quería hacer al terminar mis estudios, siempre respondía con total sinceridad: ‘No tengo claro en qué área seguir… pero tengo claro que no quiero ser profesor’.
Y, sin embargo, aquí estoy, años después, liderando una escuela de música que nació casi por sorpresa. Todo empezó dando clases como un favor para algunos amigos que tenían hijos, y poco a poco descubrí algo que no esperaba: enseñar música me gustaba. Ver cómo un alumno toca por primera vez, cómo se emociona al lograr algo que parecía difícil, cómo la música transforma su forma de expresarse…
Así nació Caja de la Música, un proyecto que no estaba planeado en mi mente ni en mi lista de deseos. Hoy es mucho más que una escuela: es una comunidad donde la música se vive con alegría, compromiso y propósito.”

¿Cómo se llama vuestra empresa y a qué os dedicáis?
“La escuela se llama Caja de la Música. El nombre tiene un doble significado: estamos ubicados en un edificio con forma de caja, y dentro de esa ‘caja’ nace y crece la música que cada persona lleva dentro.
Nos dedicamos a la enseñanza musical para niños y jóvenes, con clases de piano, guitarra, canto y otros instrumentos. Pero no nos quedamos solo en la técnica: lo más importante para nosotros es que lo que se aprenda se disfrute, que cada alumno descubra el lenguaje de la música, desarrolle su creatividad y crezca a su ritmo. Queremos despertar el amor por la música en cada persona que entra por nuestra puerta.”
¿Qué os motivó a emprender en Arganda del Rey?
“Emprendí en Arganda porque era el lugar donde vivía, donde tenía a mi familia, amigos, mi entorno. Todo mi círculo estaba aquí, y eso me permitió ver de cerca una necesidad real: muchas familias querían que sus hijos aprendieran música, pero no encontraban un espacio cercano, de confianza y con una enseñanza adaptada y actualizada para los pequeños.
Para mí no fue una decisión estratégica de expansiones o de negocio: surgió del contacto directo con la gente, con sus inquietudes y deseos. Empezar en Arganda fue como empezar en casa, respondiendo a una necesidad que veía cada día en mi comunidad.”

¿Qué relación tenéis con el municipio?
“Nuestra relación con Arganda del Rey es muy cercana. Caja de la Música nació y creció aquí, y muchos de nuestros alumnos son del barrio, vecinos, familias conocidas. Colaboramos con padres, escuelas, y nos sentimos parte activa de la vida del municipio. Cuando nuestros alumnos cumplen sus metas, no solo celebran ellos, celebramos todos como comunidad.
No somos una academia externa: somos un proyecto que surge desde dentro, que entiende a las familias y que apuesta por la cultura local.”

¿Qué valores definen vuestra empresa?
“En Caja de la Música nos define, por encima de todo, la cercanía. Tratamos a cada alumno como único, escuchamos a las familias, construimos una relación de confianza. Creemos en el crecimiento —no solo musical, sino personal—, en desarrollar sensibilidad, creatividad y espíritu de superación. Y por encima de todo, en la alegría: la música debe disfrutarse, no imponerse.
Sabemos que hoy los niños y jóvenes necesitan algo más que una partitura y unas instrucciones. Necesitan motivación, confianza, un enfoque flexible, un ambiente donde puedan expresarse y avanzar a su ritmo. Nuestro objetivo no es solo enseñar música, sino conseguir que la amen, que la sientan suya.”

¿Cómo es el día a día en vuestra escuela?
El día a día en Caja de la Música combina técnica, escucha y emoción. En cada clase intentamos encontrar el equilibrio: no queremos que sea ni un rato de juego sin foco, ni una rutina fría y mecánica. Observamos al alumno, le proponemos canciones que le motiven, le damos espacio para expresarse, y ajustamos la metodología en función del día, su ánimo, su curiosidad.
A veces los chicos llegan cansados del colegio o con preocupaciones, y ahí tratamos de convertir la clase en un respiro: con música, acompañamiento, paciencia. Otras veces llegan con energía, ilusión, ganas de compartir con sus compañeros. En ese caso, trabajamos también la convivencia, la disciplina, el respeto, la pasión por aprender.
En Caja de la Música no solo enseñamos música. Cuidamos, acompañamos, escuchamos. Y disfrutamos.

¿Qué es lo que más os gusta de trabajar en Arganda del Rey?
“Lo que más nos gusta de trabajar aquí es la cercanía con la gente: conocemos a las familias, a los alumnos, incluso a quienes ya dejaron la academia. Esa comunidad, ese sentido de barrio, hace que todo tenga más valor. Ver cómo niños que empezaron sin saber nada acaban tocando con confianza. Cómo una niña tímida empieza a expresarse. Cómo la música ayuda a crecer, a expresarse, a soñar. Eso no tiene precio.
Arganda nos da esa oportunidad: un entorno donde crecer con tranquilidad, con apoyo y con ganas.”

¿Dónde pueden encontraros o contactar con vosotros?
📱 Puedes encontrarnos en Facebook e Instagram como @cajadelamusica.arganda. También respondemos por mensaje directo o WhatsApp para resolver dudas o concertar una prueba.
📩 Si estás pensando en empezar a aprender música o quieres que tus hijos lo hagan, escríbenos sin compromiso. En Caja de la Música te esperamos, porque creemos que todos llevamos una melodía dentro.








