Entrevista Alberto Escribano 2024 parte 1

Argandeños y argandeñas, aquí os traemos la esperada entrevista a Alberto Escribano que dividiremos en dos partes, que podréis ver tanto en vídeo (que os dejamos justo debajo de YouTube), como si queréis leerla tranquilamente e ir a las preguntas que os interesan.

En esta primera parte de la entrevista conoceréis un poco más a Alberto y nos contará como fue su paso a la política, porque decidió presentarse a la alcaldía, como vivió los momentos previos a ser alcalde de nuestro municipio, como es su relación con la oposición o los proyectos que habrá en Arganda en un futuro y la situación económica actual del municipio.

En unos días lanzaremos la segunda parte y en ella podréis ver de manera más detallada aquellos problemas que os preocupan (sanidad, suciedad en las calles y cubos de basura, badenes, nuevo centro comercial, proyectos en el polígono, nuevo instituto, fiestas etc…), donde además recopilamos todas vuestras preguntas, pero eso será en unos días, de momento os dejamos con la primera parte de la entrevista, esperamos que os guste.

Para empezar, Alberto, cuéntanos un poco sobre tu trayectoria y como pasaste del periodismo a la política.

Muchas gracias, lo primero por esta entrevista. Yo soy de Arganda de toda la vida, nací aquí, mi familia es de aquí. Tuve muy claro, no sé por qué, que quería ser alcalde de Arganda. Era algo que decía siempre desde niño cuando me preguntaban y lo he dicho muchas veces. Había niños que lo típico era ser futbolista y yo decía que quería ser alcalde cuando ni siquiera sabía lo que significaba esa palabra… Yo estudié hice la carrera de periodismo después de haber pasado aquí por el colegio y el instituto.

Siempre he trabajado de periodista incluso lo he estado compatibilizando siempre con ser concejal en Arganda del Rey donde yo nunca había estado liberado ni a tiempo completo estuve la razón en el periódico gente y luego ya también estuve en la Comunidad de Madrid en el gabinete de comunicación hasta que pues un día me llaman lo primero que si quería ser diputado a la asamblea de Madrid o más bien que si quería ir en la lista porque la verdad es que iba en un puesto tan bajo que sería complicado que saliera y de hecho fui el penúltimo que salió y ya a más a más me llaman para pues un día a las 12 de la noche, me parece que era desde Génova y me dicen que al día siguiente se anuncian los candidatos de las principales ciudades de la coma de Madrid y que yo iba a ser el candidato a la alcaldía entonces bueno, pues ahí ya es cuando obviamente uno ya no tenía ningún sentido; eso fue un año antes de las elecciones y ya es cuando me dediqué solamente a la política, pero hasta entonces siempre me mantuve mi profesión porque además me gusta mucho y porque es para lo que me había formado.

Creo además que estar en política, habiendo estudiado periodismo o habiendo te dedicado a la comunicación te da otra visión de las cosas.

Esta pasión por la política, ¿es algo vocacional o te viene de familia?

Yo esto lo he dicho siempre y no hay ningún motivo porque en mi casa nunca me han hablado de política, mi familia tampoco. Nadie se ha dedicado a la política ni de refilón, pero yo sí lo tenía claro: lo veía en la televisión.

Me gustaban siempre ver las noticias desde muy pequeño, algo que normalmente tampoco es normal porque los niños, pues, lo que ven son dibujos o deportes. Pues yo no, sobre todo los dibujos, no los veía.

Sí que veía los deportes, pero aparte me gustaba mucho la actualidad. Y eso de que al final poco a poco no me tomaban en serio es lo típico. Claro, tú escuchas a tu hijo decir que quiere ser alcalde, pues al principio dices, pues ya se le pasará… Pero bueno, pues poco a poco parecía que la cosa iba más en serio. Tan en serio, que un día, pues, llego a casa y les digo a mis padres que me habían llamado de Madrid y además lo recuerdo perfectamente ya que esas cosas no se te olvidan nunca. Y que iba a ser el candidato a la alcaldía, esto no les sorprendió porque ya hacía años que veían que la cosa iba en serio. Yo llegaba a casa a las tantas veces tarde y me preguntaban ¿de dónde vienes?. Bueno, pues, del ayuntamiento del partido porque yo aparte estuve en 3 años en el gabinete de prensa también de aquí del ayuntamiento Arganda del Rey hace ya unos pocos años…

¿Qué siente Alberto Escribano cuando le hablan de Arganda del Rey?

Yo siempre he sido el mayor pesado hablando de Arganda en cualquier sitio, en la universidad, en cualquier trabajo de los que he tenido en la comunidad de Madrid. En la asamblea, de vacaciones…
Siempre he hablado de Arganda como si no hubiera otra ciudad mejor en España o otro pueblo. Y bueno, pues es que yo es algo que lo llevo muy interiorizado de toda la vida, entonces creo que de Arganda hay que hablar con orgullo igual que cada uno habla de su pueblo. Esto no es diferente a lo que hagan otras personas.

Pero quizás nosotros mismos, la gente de Arganda, hemos hablado en muchas ocasiones mal de nuestro pueblo. Entonces, yo es algo que desde el primer día lo dije, un año antes, cuando me nombraron como candidato y cuando empezamos ya pues a diseñar toda la campaña y al final se diseñan también los lemas de campaña y demás, yo salí diciendo que una de mis intenciones era recuperar el orgullo de vivir en Arganda. No porque no esté orgulloso, que yo lo he estado toda la vida, pero sí creo que además de estarlo había que mostrarlo. Y eso es lo que hice antes y lo que hago ahora yo. Ahora cuando hablo hay mucha gente en la calle que dice que nota que tienes ilusión. Bueno, pues la he tenido siempre, no es porque sea alcalde.

Mi vida desde que soy alcalde, hombre, ha cambiado en el sentido de que ahora te conoce mucha más gente, pero en el día a día lo esencial no ha cambiado. Yo ahora que estamos en pleno montaje que me habéis preguntado de la plaza de toros, yo me tiraba todo el verano cuando antes era más común ese un mes de vacaciones de niño en la playa preguntando a mi tía, a mi tío cómo iba la plaza de toros, o sea, y ahora, claro, una vez que ha empezado el montaje, pues tengo que estar aquí, pero no porque sea alcalde, sino porque no puedo estar en otro lado si no es aquí viendo cómo va la cosa.

¿Cómo viviste la campaña política y esos últimos momentos antes de ser elegido alcalde?

Bueno, yo en principio, cuando esto te lo dicen así de repente, pues te asustas un poco, eso es obvio. Yo creo que cualquiera que tenga un poco de responsabilidad afrontar algo así en un primer momento te asusta y te dice: Bueno, pues a ver si voy a ser capaz de hacerlo.

Pues a mí era algo que me motivaba mucho y que además estaba muy encima de ello junto con todo el equipo que formábamos porque me gusta ya más allá de la parte profesional, me gusta personalmente, entonces creo que nuestro papel era hacer la campaña que hicimos, desenterrando otra vez más la ilusión en la gente y sobre todo hablar a todo el pueblo, a todas las personas que vienen a Arganda, pero muy especialmente hablar a los jóvenes que nunca nadie se ha acordado de ellos y si se acordaban no lo mostraban y vuelvo a lo que decía antes.

Entonces, yo creo que funcionó porque al final ganamos las elecciones y veníamos del peor resultado de la historia y tuvimos el tercer mejor resultado de la historia en votos. Yo tuve más votos que el anterior alcalde con mayoría absoluta .Es verdad que fuimos capaces y yo creo que también algo de mérito tenemos nosotros en sacar al 80 % de la gente a votar, que eso es algo que normalmente tampoco ocurre.

Bueno, pues yo lo viví sin presión, también te lo tengo que decir porque era algo sabiendo que podíamos ganar y sobre todo, más ya hacia la recta final de la campaña, he afrontado las elecciones sabiendo que lo más normal era que no ganara porque veníamos de un resultado penoso, entonces.

Bueno, pues eso hizo seguramente que hiciéramos una mejor campaña, que lo hiciéramos siempre en positivo, que yo creo que es algo también que la gente ha pedido mucho. Yo no entré nunca en ninguna descalificación y mira que las tuve de enfrente y esto lo voy a repetir siempre, básicamente y principalmente por la edad y bueno, como no entramos en ese fango. Pues yo creo que la gente lo valoró y al final nos dio ese voto de confianza que hizo posible que Arganda cambiara después de 8 años.

¿Cómo es tu relación con la oposición?

Pues la relación con el anterior alcalde no es muy fluida, la verdad. Pero bueno, también creo que ellos necesitan tiempo para asumir que ya no están en el gobierno, y eso, como yo lo he vivido desde la otra parte, creo que también ocurre que es un shock importante del que te tienes que recuperar, y solo te recuperas con tiempo. Y esto no es algo de izquierda ni de derecha. Esto es algo humano; tu posición cambia y eso lo tienes que asumir, para bien o para mal. Y luego, sí que, bueno, con Vox, es verdad que la situación ahora está mucho más tranquila y mejor, pero nadie se lo imaginaba, porque tuvimos, sobre todo, meses muy difíciles.

Bueno, y yo también lo he dicho muchas veces: quizás ninguno de los dos partidos imaginaba que podía ocurrir lo que ocurrió, porque es verdad que el Partido Socialista, pues, prácticamente daba por hecho que iba a seguir con mejores resultados, y es verdad que Vox, quizás, pensaba que íbamos a tener que gobernar juntos porque nosotros íbamos a perder las elecciones. Bueno, pues nada, eso ocurrió. Fue totalmente diferente, y yo creo que todas esas piezas también necesitan recolocarse y recomponerse, y al final, las relaciones humanas van mucho de eso.

Yo creo que la situación ahora es tranquila. Hemos llegado a acuerdos para hacer posible, por ejemplo, las fiestas patronales, porque había que hacer muchas modificaciones de crédito para hacer posible el tema de las subvenciones a los clubes y también para que se pagaran partidas de cultura y servicios sociales. Hubo que hacer muchas modificaciones que se tenían que aprobar en pleno, porque recuerdo también que el Partido Socialista y Vox llegaron a un acuerdo para que cualquier modificación hubiera que hacerla en el pleno, que es donde ellos dos tienen mayoría. Claro, entonces, bueno, pues yo creo que ahora la situación es mejor y que todo se irá tranquilizando, porque todo es cuestión de tiempo.

¿Cómo es un día en la vida del alcalde?

Pues yo no te puedo contar un día típico porque no hay un día normal y no hay ningún día que sea igual que el siguiente. Yo te puedo contar, por ejemplo, cómo ha sido el día de hoy, y con decir que el de mañana va a ser totalmente diferente, pues cada uno que se haga su idea.

Hoy, por ejemplo, a las 8:30 creo que estábamos en el polígono. Además, esto es algo que a mí me gusta mucho: lo piso mucho para tomar café a las 8 de la mañana y estar allí, porque además te enteras de muchas cosas, de muchos problemas que, si no pisas el terreno, no lo sabes. Esto me da igual para el pueblo que para el polígono.

Luego, nos hemos ido a ver cómo estaban las obras del camino del Valle, que han empezado hoy de nuevo después del parón que ha habido que hacer por la ola de calor. Y una vez que hemos terminado allí, pues estábamos en el Ayuntamiento.

Y bueno, hay veces que piensas que vas a llegar en 10 minutos y llegas en una hora. Una de las cosas que más me sorprenden de mi día a día es que sí, te reúnes con mucha gente que quiere venir a Arganda, o que ya está y quiere poner una empresa, o que quiere cambiar su empresa, o que quiere construir una nave. Hay muchas reuniones con gente que quiere invertir, y eso es algo que no me imaginaba.

Antes no digo que no ocurriera, no lo sé, pero no lo veía, porque yo creo que también lo que hacía falta era dar mucha más repercusión a todo lo que se hace aquí dentro y contar muchas más cosas de las que se contaban. Y eso es al final lo que estamos haciendo.

Luego, pues atender a mucha gente que me lo pide, vecinos por cualquier cosa, desde la cosa más pequeña a algo más importante. Pero es verdad que, al final, para cada uno lo suyo es lo principal. Yo recibo a todo el mundo, hablo con todo el mundo, me paro en la calle con todo el mundo.

Y bueno, al final, mi día a día, pues yo creo que se basa en estar en la calle. Eso sí que es verdad, no lo he calculado, pero la mayoría del tiempo estoy en la calle y en todos los lados. Yo creo que cualquiera en Arganda que quiera verme me va a encontrar. No puedo decir la típica excusa de «el alcalde es que no pisa la calle» porque yo no salgo de ella.

Volviendo al momento antes de ser alcalde, ¿Recuerdas con quien viviste esos instantes previos?

Pues con mis padres, creo que éramos seis o siete. Estábamos mis padres, estaba Javi que es ahora concejal de deportes, Alicia que es la jefa de atención al ciudadano, estaba Pablo que fue alcalde anteriormente y estaba un hombre que es de toda la vida del PP y que nos apoya siempre mucho que se llama Joaquín Sal.

Al principio de la legislatura se produjeron momentos complicados con VOX, ¿cómo los viviste?

Pues a ver, a mí, que me gusta mucho la política, entiendo que estas cosas son política y, además, que a mí me motivan, pero sí creo que han pasado cosas que no tienen mucho sentido. ¿Yo qué sé? Que nosotros presentáramos una bajada de impuestos en el polígono y que me lo tiren.

Ya por mí, egoístamente, si el ayuntamiento va a seguir recaudando lo mismo, pero creo que no tenía mucho sentido porque habíamos hablado mucho tiempo, casi dos años, casi a diario, de que había que acabar con eso porque no era normal que se triplicaran los impuestos en el polígono.

Por decirte un aspecto, no me hacías daño a mí; si a mí no me estás haciendo daño, estás haciendo daño a la persona que tenía que haber pagado menos y no lo pagaba.

Ahora, además, como sabemos, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha tumbado esa ordenanza porque ha declarado ilegal la subida de impuestos que hizo el Partido Socialista. Nosotros, como creemos que eso era lo más justo y que, además, tenía que quitarse cuanto antes y entrar en vigor cuanto antes, renunciamos a recurrir al Tribunal Supremo para no seguir alargando este procedimiento.

Entonces, bueno, yo me considero una persona bastante calmada. No me suelo poner muy nervioso y, si me pongo nervioso, no lo muestro.

Bueno, pues yo creo que es cuestión de tiempo que cada uno se vaya recolocando en sus funciones. Lo que es cierto es que ya he visto yo varias legislaturas y suele ocurrir mucho. Porque también, como te digo, y aquí me incluyo, nos ocurría a nosotros cuando el PP perdió la alcaldía.

Bueno, pues yo creo que te entra rabia y que no lo entiendes, y luego, según pasa el tiempo, vas encontrando los motivos.

¿Cuál es tu visión a largo plazo en Arganda? Y por otro lado, ¿Qué proyectos se acabarán?

Pues nosotros tenemos un proyecto que es el que tenemos que sacar sí o sí. La cosa, afortunadamente, va bien, pero hay que poner toda la carne en el asador, y es la plataforma logística de los terrenos de la A3. Eso es algo que yo llevo escuchando toda la vida, igual que vosotros seguramente desde que era pequeño, y nunca se ha llegado a dar el paso que ya dimos hace unos meses aquí en Arganda, que era aprobar definitivamente ese trámite urbanístico en el pleno municipal.

Eso ya se hizo para que la Comunidad de Madrid, que es la propietaria de casi la totalidad de los terrenos, pueda desarrollar aquello y que allí vengan empresas muy importantes, como las que tienen que venir, y parece ser que va todo muy bien.

Yo creo que, si somos capaces de desarrollar eso, Arganda al final va a cambiar. No solo me refiero a que cambie físicamente la ciudad, sino que va a cambiar, entre otras cosas, algo a lo que yo me he dedicado mucho, que es la percepción que tienen fuera de Arganda de lo que es Arganda del Rey.

Pero Arganda, bueno, pues es que si tú preguntas en la ciudad de Madrid, mucha gente no sabe ni que tiene una parada de metro, algo tan básico que lleva 25 años. Entonces, yo creo que eso es síntoma de que no nos hemos dedicado a hablar hacia fuera de lo que es Arganda.

¿Se ha puesto a Arganda en el mapa desde que eres el alcalde?

Pues mira, yo creo que a mí me llaman muchas veces y me dicen: «No, es que estamos escuchando que Arganda está cambiando, que Arganda ahora está recibiendo un montón de interés, que solo se habla de Arganda en la televisión.» Estas cosas, que ni mucho menos solo se habla de Arganda en la televisión, pero que esa percepción se instale es bueno.

Que nosotros estemos todo el día diciendo que hemos unido urbanismo e industria para que toda la inversión se canalice a través de ahí, que demos estadísticas de las licencias que se están dando de funcionamiento e instalación de empresas que nunca se habían dado a conocer, que hayaamos contado, porque es verdad, que se está triplicando la inversión, que estamos triplicando, perdón, las licencias.

Que hayamos dicho que hemos querido bajar los impuestos, aunque no nos hayan dejado; que hayamos anunciado que se va a construir un parque comercial; que hayamos dicho, porque es verdad, que hemos desbloqueado una planta farmacéutica que llevaba años bloqueada y que hoy en día ya es una realidad que se ve, que tú vas allí y ya lo ves con 40 millones de euros.

Todo eso va encaminado a que se genere interés por Arganda. Entonces, que se pase de un estado de ánimo en el que digan: «Bu, allí no vayas porque no te lo van a permitir, van a tardar años en darte una licencia,» pues cambiar eso cuesta mucho. No es que lo hayamos arreglado ni mucho menos; estamos en el camino, pero se ha instaurado un clima de opinión totalmente diferente, y eso hace que ocurran cosas buenas.

¿Qué proyectos tienes en mente para el futuro de Arganda del Rey?

Yo creo que ahora hay tres cosas… Te hablo de proyectos materiales, por decirlo así, que son importantes. Hay uno que depende de nosotros, e incido mucho en el camino del Valle porque es la primera entrada que tiene la mayor parte de la gente que viene a nuestro polígono. Era un camino de cabra, por decirlo así. Cantidad de gente me ha dicho: «¿Cómo podéis tener esa entrada al polígono durante años, durante 20 años casi?» Bueno, pues siempre hemos dicho que era imposible, pero nadie se ha preocupado de saber si era posible. Y era posible, tan posible como que había que ir a la Dirección General de Agricultura a solicitar una autorización, y que la Dirección General de Agricultura de la Comunidad de Madrid te diga cómo tienes que hacer eso. No puedes echar alquitrán, tienes que echar lo que ellos te dicen. Vale, pues ya está, se hace eso que era un trámite aparentemente sencillo; no lo había hecho nadie, tampoco esos que ahora tanto se enfadan porque vayamos a conseguirlo. Bueno, pues yo no tengo la culpa. Oye, haber estado más preocupados en lo importante. Hemos estado perdiendo muchos años en cosas accesorias.

Luego, creo que es importante también que, por fin, hayamos conseguido que la Comunidad de Madrid nos construya el instituto. Y esto es algo que también hay que decir muy claro: el instituto era totalmente necesario, lo llevamos años pidiendo. Porque ya hace, pues, entre 8 o 9 años que se cedió la parcela, o que se hizo el informe, mejor dicho, de necesidad de instituto en Arganda, y posteriormente se hizo una parcela. Bueno, pues recuerdo que la petición de licencia estaba en un cajón cuando nosotros llegamos, mientras estaban convocando manifestaciones y poniendo pancartas aquí en el balcón del Ayuntamiento de la Plaza de la Constitución contra la Comunidad de Madrid. Eso ha ocurrido y es una vergüenza, lo digo siempre. Aparte, el instituto está ya muy avanzado; si la gente lo quiere comprobar.

Yo creo también que tenemos que estar muy felices porque Arganda del Rey vaya a tener, por fin, un cuartel de la Guardia Civil acorde al cuerpo y a las necesidades, para poder reunir allí todos los servicios, justamente en una zona estratégica, porque es una zona nueva de entrada y salida de la ciudad. Yo he estado ya también con los responsables del Ministerio del Interior, y yo creo que todo esto, y mantener un buen clima con todas esas administraciones, va a hacer que Arganda crezca. Nos hemos dedicado durante muchos años a enfrentarnos, y yo también lo decía siempre: no tiene ningún sentido porque, al final, Arganda depende mucho, como cualquier otra ciudad, de lo que haga o deje de hacer la Comunidad y de lo que haga o deje de hacer el propio Gobierno de España.

Estamos también ahora ya en plena construcción; ha comenzado la construcción de 210 viviendas del Plan Vive. La licencia la dimos en tiempo récord. No te sé decir ahora mismo el número de días, pero creo que no llegó ni al mes. Eso era impensable antes. Bueno, pues, frente a un Gobierno que decía que iba a construir no sé cuántas viviendas sociales y no hizo ninguna, nosotros vamos a hacer 210. Nosotros me refiero a la Comunidad de Madrid en Arganda del Rey. Bueno, pues, en la Comunidad de Madrid construyen gobiernos en ciudades gobernadas por el PP, por el PSOE y por Podemos. Me refiero a que poner la excusa de que «es que claro, como ahora estás tú, lo hace Ayuso» no tiene mucho recorrido.

Háblanos del Plan Vive, cuéntanos que es y como va el proyecto

El Plan Vive es un plan de la Comunidad de Madrid que construye en decenas de municipios de la Comunidad de Madrid en parcelas suyas o cedidas por los ayuntamientos. Aquí tenían una parcela, y bueno, yo con la Consejería he estado ya, pues, casi un año y poco en muchas ocasiones porque había que acelerar ese proyecto, y además ellos también lo tenían muy claro.

Entonces, bueno, yo creo que era algo muy necesario: vivienda de alquiler, y no solo para jóvenes. Este Plan Vive no es solo para jóvenes, sino para toda la franja de edad. Lo que sí es que tienen prioridad los vecinos que lleven como mínimo 3 años empadronados en Arganda del Rey. Entonces, yo creo que eso es algo que pide mucha gente y que va a ser una realidad. Pero no solo eso. Se están construyendo más promociones de vivienda de alquiler. Se está construyendo al lado del Plan Vive otra promoción de vivienda de protección en la zona del metro. No es que toda esa construcción haya surgido así de la nada; es que muchas peticiones se habían solicitado desde hace muchísimo tiempo. El terreno estaba desde hace 20 años. Las parcelas estaban porque estas parcelas se aprobaron hace, pues, eso más de 20 años; el Plan General es del 99, me parece. Me refiero a que nada de esto lo he inventado yo, lo que hemos hecho nosotros es agilizarlo y ahí meto toda la inversión en la empresa.

Cuando un empresario te dice que quiere venirse de cualquier otro pueblo aquí, pues yo creo que es que tienes que acelerar todo lo que puedas porque si no siempre se va a cruzar alguien que sea más listo y que se lo lleve a otro lado.

En lo que llevas gobernando, ¿cuál es el proyecto del que estás más orgulloso?

Bueno, yo creo que hay que diferenciar. Del proyecto del que estoy muy orgulloso es de la carretera de Morata. No es el más importante, pero es que eso era también increíble cómo una carretera como esa estaba en un estado de abandono tan lamentable. Entonces, estoy orgulloso de eso y de otras muchas cosas. Pero bueno, eso es. Yo creo que es síntoma de todo lo que empezamos a hacer en su día, en todo este año que llevamos.

Y yo creo que, ¿Cuál va a ser el estandarte? Pues ahí sí que vuelvo al mismo proyecto que te dije: es la plataforma. Una vez que se consiga, y yo creo que va a haber noticias buenas pronto, va a ser algo que va a calar mucho en Arganda, y la reacción de todo el mundo va a ser: «Ahora sí, ya era hora de que eso viera la luz.»

La situación económica en Arganda está pasando un momento complicado; puedes contarnos un poco sobre cómo va avanzando la situación.

Pues mira, yo lo primero que quiero decir es que el anterior alcalde comentó hace poco que el PP iba otra vez a destrozar las cuentas. No sé qué estudio habrá usado para hacer esa afirmación, pero las cuentas de Arganda están destrozadas, y ahí lleva razón. Sin embargo, hay que hablar en presente y en pasado porque las cuentas de Arganda se destrozan desde el momento en el que uno se sienta en una mesa del Ayuntamiento y la interventora le dice que hay 1.083 facturas de luz por valor de casi 7.000.000 euros que están sin pagar, correspondientes a los años 2020, 2021 y 2022.

Las cuentas del Ayuntamiento se destrozan cuando recibes una sentencia del Tribunal Supremo de Justicia de Madrid que dice que tenemos que devolver más de 9 millones de euros porque hubo un señor, junto a todo un gobierno, que aprobó una subida de impuestos brutal que ha sido declarada ilegal. Las cuentas del Ayuntamiento también se destrozan cuando nos vemos obligados a cumplir con una sentencia que dice que hay que pagar 5 millones de euros a un promotor porque el anterior gobierno no lo hizo. Esa sentencia tuvimos que cumplirla, y se dictó cuando yo creo que tenía 7 u 8 años. Además, a mí me provocó tener que pagar una multa de 300 euros mensuales desde que fui elegido alcalde hasta el mes 11 de ese año.

Entonces, claro que están destrozadas las cuentas. Las cuentas las ha destrozado el PSOE porque se inventaron un presupuesto de 95 millones de euros que no hay por dónde cogerlo, y que no existe el dinero porque en Arganda nosotros no recaudamos 95 millones de euros ni aunque nos creamos Superman.

Bueno, pues yo creo que esa gestión es la que ha destrozado las cuentas y que ahora tenemos el reto de arreglarlas. Para arreglarlas, lo que hay que hacer es dejar de gastar y dejar de tirar el dinero. Hemos reducido el sueldo en más de 2 millones de euros; solo en este primer año han sido 580.000 euros, eliminando la cláusula de que el alcalde de Arganda tenía que ganar lo máximo que permitía la ley, que fue lo que él aprobó. También hemos bajado las asignaciones de los grupos políticos un 10 %, reducido el sueldo de todos los cargos de confianza del Ayuntamiento, y eliminado de 12 a 0 cargos de confianza, así como reducido el número de liberados de 12 a 8.

Todo eso hace que, en un año, hayamos ahorrado 580.000 euros, y eso multiplicado por el tiempo creo que es importante. Entonces, sí, las cuentas estaban destrozadas; siguen muy mal y vamos a tener que arreglarlas. Que no se arregle esto en 4 años, eso es obvio.